El Grupo Temático Mundial de WASH define la investigación como la búsqueda de “un enfoque sistemático para comprender mejor las intervenciones de agua, saneamiento o higiene que tienen como objetivo mejorar la salud de las poblaciones afectadas por crisis humanitarias”. La investigación en el campo de la asistencia humanitaria (incluido WASH) sigue siendo insuficiente tanto en cantidad como en calidad (ver introducción). Estudios recientes han descrito la necesidad de mejorar los datos cuantitativos y cualitativos, medir los resultados de salud y comportamiento y fortalecer la investigación sobre las poblaciones afectadas y su seguridad y acceso a las instalaciones de WASH.

Hay muchas formas de generar evidencia, como estudios de casos, revisiones, investigación de campo, investigación de acción, Monitoreo M.2 y Evaluación M.3 y estudios antropológicos. La evidencia puede generarse a nivel local y usarse localmente o en un nivel más amplio. Lo importante es la difusión de los hallazgos a la comunidad humanitaria y académica para mejorar continuamente la respuesta de WASH a las poblaciones afectadas.

Los hallazgos pueden difundirse a través de artículos científicos, guías técnicas publicadas, comunicación externa y eventos de aprendizaje locales o internacionales conjuntos, cada uno de los cuales puede adaptarse a diferentes propósitos o audiencias:

• Un estudio de caso es un análisis descriptivo y exploratorio de una persona, grupo o evento y se usa comúnmente en las ciencias sociales para comprender y documentar qué funciona y cómo.
• Un artículo científico presenta los hallazgos de investigación escritos por investigadores y científicos. Por lo general, se consideran fuentes primarias y se escriben principalmente para otros investigadores; es posible que sea necesario modificarlos para que sean accesibles a los profesionales.
• Los documentos como manuales técnicos están escritos principalmente para profesionales y, a menudo, se basan en estudios de casos y experiencias colectivas.

La promoción de la higiene puede basarse en una variedad de disciplinas y experiencia en ciencias sociales o salud pública. Sin embargo, debe evaluarse continuamente el equilibrio entre el rigor científico y los desafíos de realizar estudios y al mismo tiempo responder a una crisis humanitaria. En consecuencia, los medios para implementar estudios sólidos que apoyen la implementación de programas efectivos de HP deben ser parte integral de la estrategia de respuesta de las organizaciones y el sector. Las modalidades de implementación, incluso el “cuándo” llevar a cabos estos estudios, deben identificarse al comienzo de la crisis o durante el desarrollo de la estrategia. A continuación, se enumera una lista de criterios para enmarcar los estudios:

• Se puede implementar un estudio para abordar las necesidades a corto, mediano o largo plazo como parte de una planificación futura más integral.
• La investigación puede ser “retrospectiva”, en los casos en que el proyecto de investigación consiste en analizar datos ya recopilados durante misiones operativas anteriores
  (p. ej., a partir de evaluaciones de necesidades, monitoreo, evaluaciones de programas e informes finales), o “prospectiva”, si la actividad de investigación se ha implementado específicamente para responder a una pregunta de investigación determinada.
• Un estudio puede llevar a la producción de herramientas o métodos que pueden diferir según sus objetivos, como recomendaciones, protocolos, guías, documentos de información y educación, nuevos materiales o herramientas de capacitación.
• Dependiendo del tema, pueden participar en el estudio socios de diferentes organizaciones (científicas, institucionales, operativas y técnicas).

Proceso y buenas prácticas

• Colaborar con organizaciones de investigación nacionales o internacionales y/u otras ONG de WASH para minimizar o superar algunos de los desafíos que se enfrentan al realizar investigaciones en entornos humanitarios, como la inseguridad, la imposibilidad de acceder a las personas afectadas, la disponibilidad limitada de personal de investigación adecuadamente capacitado o una falta de recursos.

• Cumplir con la ética de la investigación: esto es fundamental en emergencias donde las personas afectadas por crisis pueden haber vivido experiencias traumáticas y ser muy vulnerables. Los métodos para obtener el consentimiento informado deben estar claramente articulados y los estudios deben incorporar un análisis de riesgos y beneficios.

• Considerar las implicaciones éticas de usar grupos de control con cuidado, particularmente cuando las necesidades son altas.

• Involucrar a los profesionales humanitarios durante todas las etapas de desarrollo e implementación del estudio al trabajar con ellos para diseñar y llevar a cabo investigaciones. Las instituciones de investigación rara vez tienen la misma capacidad local que las organizaciones humanitarias en términos de personal, logística y redes locales.

• Trabajar en estrecha colaboración con los investigadores locales para mejorar los conocimientos contextuales, proporcionar apoyo y orientación mutuos y fortalecer las capacidades locales. Tal colaboración puede implicar trabajar con investigadores locales durante todo el estudio, desde la recopilación de datos hasta la publicación de los hallazgos del estudio. Construir una relación de confianza con los investigadores locales es fundamental para lograr una investigación de alta calidad.

• Utilizar una variedad de métodos y estrategias para manejar el impacto de un contexto cambiante (p. ej., utilizar métodos cuantitativos y cualitativos A.4 e intervenciones diferidas en lugar de grupos de control). Puede ser necesario cambiar los métodos durante un estudio debido a una variedad de factores, como problemas de seguridad o movimientos de población a gran escala. Puede afectar el tamaño de la muestra del estudio, la elección del grupo de estudio, la elección de las herramientas de recopilación de datos (cambiar de medios presenciales a medios remotos), fuentes de datos (cambiar de primarios a secundarios), la capacidad de seguir cohortes a lo largo del tiempo y, potencialmente, la capacidad de continuar el estudio.

• Evitar asumir que se puede generalizar. Para cualquier estudio de investigación realizado en un contexto específico, es poco probable que sus hallazgos se puedan aplicar directamente a otro contexto. En los casos en que el conocimiento pueda tener aplicabilidad en otros lugares, los investigadores deben demostrar cómo, si es que lo hacen, sus resultados son relevantes para otros entornos y crisis, para facilitar la adopción del conocimiento.